Siempre quise un blog que se viera así…

La verdad es que desde que comencé en el cibermundo a hacer algunas fechorías, como abrir páginas y espacios para dizque subir algún textillo o tener el propósito de ejercitar la literatura, nada se volvió más complicado que darle una especie de diseño agradable y atractivo a lo que fuera que estaba perpetrando. Hoy, que ya cuento con algún conocimiento más decente del manejo de esta suerte de sitios, me da gusto ver que pude vencer una de mis grandes limitaciones: enfrentarme al html y, en cierta medida, salir victorioso. No todo es miel sobre hojuelas, muchos otros y mejores blogs hay en el mercado y, ¿quién puede culparlos? Cada quien hace su esfuerzo, pero haber sido de la generación que todavía necesitaba una interfaz amigable y prefabricada para materializar lo que estaba en mente, sencillamente hace que esta suerte de rediseño logrado se ofrezca como triunfo incomparable. Y, pues, en vista de que, en efecto, ha crecido y tiene ganas de ir para más, esta sencilla actualización no tiene otro propósito que confesarse ante los dos lectores que frecuentan este sitio y hacer gala, aunque no tan pedante, del orgullo que supone haber podido lograr el slider automático que tanto quería desde que estaba en España. Otro día me daré a la tarea, tal vez, de mejorarle los números, de suerte que no sean todo el tiempo dieciocho novedades, que puede ser un arma de dos filos (o muy prolífico se es o se abandona por demasiado tiempo), máxime cuando muchas de esas dieciocho entradas ya huelen a diseño pasado. Pero en fin, las metarreflexiones son para compartirse acaso con cuidado y tiento y dejarlas ir. Por mientras vaya esta entrada dominguera y ríase la gente.

Publicar un comentario

Copyright © Pillaje Cibernético. Diseñado por OddThemes